Estados Unidos ha lanzado un bombardeo aéreo sobre tres bases nucleares estratégicas de Irán la noche del sábado, según confirmó el presidente Donald Trump en un mensaje a la nación desde la Casa Blanca. En su alocución, el mandatario calificó la operación como un “espectacular éxito militar” y aseguró que las instalaciones atacadas “han quedado completa y totalmente volatilizadas”.
Los blancos fueron las instalaciones de Fordo, considerada la joya del programa de enriquecimiento de uranio iraní; Natanz, una planta clave en el desarrollo nuclear del país; e Isfahán, lugar donde presuntamente se almacenan misiles balísticos de largo alcance. De confirmarse la magnitud del daño, el ataque supondría un retroceso significativo para las capacidades nucleares y armamentistas de Teherán.
“Irán, el matón de Oriente Medio, debe ahora aceptar la paz. Si no, futuros ataques serán mucho mayores —y mucho más fáciles”, advirtió Trump durante su mensaje, flanqueado por el secretario de Estado Marco Rubio, el secretario de Defensa Pete Hegseth y el vicepresidente J.D. Vance. El general Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto, y Hegseth ofrecerán una rueda de prensa con los detalles tácticos del ataque este domingo.
Trump subrayó que estos eran “los objetivos más complicados y quizá los más letales” del arsenal iraní, pero advirtió que Estados Unidos está preparado para atacar otros blancos estratégicos “con precisión, rapidez y habilidad” si Irán no pone fin a su programa nuclear.
Aunque no lo dijo explícitamente, el mensaje fue claro: si Teherán no acepta el ultimátum, su régimen y los líderes que lo encabezan podrían estar en riesgo.
Estados Unidos: esta operación representa un giro contundente en la política exterior
Esta operación representa un giro contundente en la política exterior de Estados Unidos, especialmente bajo la administración de Trump, quien había prometido evitar nuevos conflictos en el extranjero.
Sin embargo, el conflicto entre Israel e Irán, y las recientes amenazas del régimen iraní, llevaron a la Casa Blanca a tomar partido abiertamente junto al gobierno de Benjamín Netanyahu.
En su mensaje, Trump confirmó que hubo una estrecha coordinación con Israel durante toda la operación. “Hemos trabajado como un equipo como nunca antes, y hemos dado un paso enorme para eliminar esta terrible amenaza contra Israel”, expresó el mandatario.
El presidente también informó que los ataques se completaron con éxito y que “todos los aviones están ya fuera del espacio aéreo iraní y de regreso a sus bases”. Trump sostuvo una reunión con su Consejo de Seguridad Nacional horas antes del operativo. En sus redes sociales, remató diciendo: “Fordo ha desaparecido”.
Este ataque, considerado por analistas internacionales como una escalada sin precedentes, podría desencadenar una respuesta militar por parte de Irán. La comunidad internacional observa con atención el desarrollo de los acontecimientos, mientras crece la preocupación por una posible guerra abierta en Medio Oriente.