Por Sandra Bellido Urquizo
¿Y Ahora Qué?… A propósito del 485 aniversario de la fundación de la Ciudad Blanca, celebrado el 15 de agosto, es necesario detenernos a reflexionar sobre la situación actual de Arequipa, sus avances, pero sobre todo sus grandes deudas en materia de gestión pública, transporte y desarrollo urbano.
En décadas pasadas, era casi una tradición que las autoridades municipales inauguraran paquetes de obras en el marco del aniversario de la ciudad. Se entregaban parques remodelados, pistas asfaltadas, y hasta proyectos emblemáticos. Sin embargo, hoy ese impulso parece haberse perdido: Arequipa llega a su aniversario sin mayores anuncios ni planes de impacto.
Uno de los problemas más graves sigue siendo el transporte urbano. Desde los intentos del exalcalde Simón Balbuena Marroquín (2007-2010) por implementar el famoso Sistema Integrado de Transporte (SIT), no se ha logrado un verdadero ordenamiento. Los buses que circulan hoy solo llevan el nombre de SIT, pero carecen de un sistema moderno, seguro y eficiente.
El tráfico es un caos cotidiano: conductores que no respetan las reglas de tránsito, exceso de velocidad en avenidas peligrosas, accidentes frecuentes de combis y buses, con heridos y lamentablemente también fallecidos.
Arequipa, pese a ser la segunda ciudad más importante del Perú, aún no cuenta con un plan integral de movilidad urbana que la modernice y reduzca la contaminación.

Otro problema son las zonas comerciales como el Avelino Cáceres o Río Seco que se han convertido en verdaderos puntos críticos, por la gran congestión vehicular extrema que afecta a miles de usuarios, la contaminación sonora y ambiental, proliferación de ambulantes que ocupan las vías, inseguridad ciudadana con robos y extorsiones.
Lejos de modernizarse, estos espacios siguen siendo sinónimo de desorden, suciedad y falta de planificación urbana.
Además de pequeñas obras de mediano impacto, lo único que ha hecho el alcalde, Víctor Hugo Rivera es anunciar proyectos viales e infraestructura, pero la percepción ciudadana es mayoritariamente negativa.
Arequipa: ¿Qué ha hecho el gobierno regional de Arequipa?
La otra pregunta es: ¿Qué ha hecho el gobierno regional por Arequipa? El actual gobernador, Rohel Sánchez, natural de Cajamarca, ha sido cuestionado por su falta de proyectos de impacto. Hasta la fecha no se observa una obra emblemática que marque su gestión.
A pesar de la ambiciosa agenda, no hay grandes obras concluidas como parte de su gestión. Por ejemplo, en la vía Arequipa–La Joya, el puente presenta solo un avance físico del 91.9 %, y avance total es de solo 23.9 %. El túnel mellizo y el intercambio aún no se inician.
Solo se ha avanzado el 58 % del hospital Maritza Campos y no será culminado antes de agosto de 2026, entre otros proyectos.
Arequipa es una ciudad con enorme potencial histórico, cultural y económico. Sin embargo, enfrenta problemas estructurales que las autoridades han sido incapaces de resolver durante años: transporte, desorden urbano, contaminación e inseguridad.
Más allá de los desfiles y fuegos artificiales, lo que la ciudad necesita son compromisos serios y políticas sostenibles que garanticen un verdadero desarrollo para los próximos años.