El abogado y notario Miguel Ángel Linares sorprendió al anunciar su renuncia irrevocable al cargo de consejero regional por Arequipa. La decisión, según explicó, “responde a los constantes bloqueos que ha enfrentado en sus intentos de fiscalizar la gestión del Gobierno Regional de Arequipa (GRA), lo cual considera incompatible con los objetivos que se trazó al asumir el cargo”.
«Todos mis intentos por fiscalizar al Gobierno Regional de Arequipa han venido siendo bloqueados», declaró Miguel Ángel Linares. Señaló que su renuncia se concretará automáticamente al ausentarse por tercera vez consecutiva a una sesión del Consejo Regional, procedimiento que da pie a su vacancia por inasistencia.
Aseguró que esta acción es una “autorevocatoria” meditada y coherente con su convicción de que podrá ejercer una mejor vigilancia desde fuera del Consejo.
En medio de especulaciones, Linares descartó que su dimisión tenga fines electorales. «No seré candidato a Senador o Diputado», afirmó, aunque dejó claro que no se alejará del ámbito político y que continuará participando activamente en temas públicos. También aclaró que no milita en ninguna agrupación política, lo que, según él, le permite mantener independencia de criterio.
Miguel Ángel Linares y sus contratos con el Gobierno Regional
La conferencia también generó controversia cuando se le consultó por el presunto incremento de sus ingresos como notario tras asumir el cargo público, en relación con contratos con empresas ligadas al Gobierno Regional.
Linares respondió que su doble rol es legal. «La ley me permite seguir contratando con el Estado al ocupar el cargo de notario», enfatizó. Su salida del Consejo Regional deja un escaño vacante y plantea interrogantes sobre el equilibrio político y las tensiones internas que persisten en el órgano fiscalizador del GRA.
