El Patrón de Atico. Una explosión ocurrida en una mina subterránea en Atico, en la provincia de Caravelí en Arequipa, reveló algo más profundo que un simple problema minero. Durante una intervención en las instalaciones de la empresa Inti Gold Mining, las autoridades encontraron indicios de trabajos con explosivos, a pesar de que existía una orden vigente que prohibía sus operaciones.
Este hallazgo reavivó una investigación sobre una de las disputas más violentas por el control del oro en el sur del país, en la que estaría involucrado el prófugo Wilber Tito Pérez, conocido como el «Patrón de Atico».
Según la Policía, Tito Pérez sería el cabecilla de una presunta organización criminal encubierta bajo el nombre de la asociación minera Calpa Renace. A finales de 2020, junto a su hermano y un grupo armado que incluía a ciudadanos extranjeros, habría liderado enfrentamientos por el control de concesiones mineras en Atico.
El más cruento se produjo en junio de 2022, con un saldo de 14 muertos, tras un enfrentamiento armado entre las agrupaciones Calpa Renace y Atico Calpa.
‘Patrón de Atico’: Armas, minería ilegal y una red criminal detrás del conflicto minero
La Fiscalía sostiene que el enfrentamiento en Atico fue producto de una organización criminal liderada por Wilber Tito Pérez, quien habría provisto a su grupo de armas como fusiles R15. El conflicto se habría intensificado luego de que la empresa Inti Gold transfiriera sus operaciones a otra asociación, tras negarse a otorgar mayores beneficios a Calpa Renace.
La investigación también apunta a la participación de funcionarios corruptos, como Adrián López Portocarrero, alias «Papu», trabajador de Sucamec, acusado de facilitar permisos de armas de forma ilegal a cambio de sobornos. Estas licencias habrían permitido ejecutar desalojos armados.
Tito Pérez, señalado como autor intelectual y financista de los ataques, se mantenía oculto mediante una red de desinformación. Actualmente está prófugo y enfrenta múltiples cargos, incluyendo homicidio y conspiración al sicariato, con una alerta azul de Interpol activa en su contra.
Por su parte, Intigold también es investigada por continuar con operaciones mineras en terrenos clausurados. El caso del ‘Patrón del Sur’ sigue revelando una trama de crimen, corrupción y ambición en torno al oro en el sur del país.
Hoy en día, Atico es visto como el “nuevo Pataz del sur”, enfrentando también problemas de minería ilegal y violencia. Los líderes de las comunidades mineras reportan amenazas, extorsiones y agresiones frecuentes, mientras que la población pide que se declare el estado de emergencia para controlar el aumento de la violencia.