La Plaza de San Pedro en el Vaticano fue escenario este domingo 7 de septiembre de 2025 de un hecho histórico para la Iglesia católica: la canonización de Carlo Acutis, el joven italiano fallecido en 2006 y conocido como el “patrón de Internet”.
La ceremonia, presidida por el papa León XIV, lo proclamó santo junto con Pier Giorgio Frassati, en medio de una multitudinaria celebración a la que asistieron decenas de miles de fieles de todo el mundo.
Durante la liturgia, el prefecto del Dicasterio para la Causa de los Santos presentó las biografías de ambos beatos y solicitó formalmente su inscripción en el libro de los santos. Tras la fórmula solemne en latín pronunciada por el pontífice, la multitud estalló en aplausos.
Entre los presentes destacaron los padres, hermanos y jóvenes devotos de Acutis, autoridades eclesiásticas, el presidente de Italia, Sergio Mattarella, y la familia del nuevo santo. Su madre, Antonia Salzano, llevó hasta el altar un relicario que contenía un fragmento del corazón de su hijo.
La vida de Carlo Acutis
Carlo Acutis nació en Londres el 3 de mayo de 1991, aunque creció en Milán. Desde temprana edad demostró una fe intensa y un gran amor por la Eucaristía, llegando a afirmar: “La Eucaristía es mi camino al Cielo”.
Paralelamente, mostró un extraordinario talento en informática, que puso al servicio de la evangelización mediante el diseño de páginas web, la elaboración de planes de oración digitales y colaboraciones con comunidades religiosas.
Su vida, aunque breve, estuvo marcada por la espiritualidad y el compromiso social. Se inspiró en San Francisco de Asís, dedicando tiempo a ayudar a los más necesitados y promoviendo valores de humildad y solidaridad.
En 2006, a los 15 años, fue diagnosticado con una leucemia fulminante y falleció pocos días después. Actualmente, su cuerpo reposa en el Santuario de la Spogliazione en Asís, adonde acuden miles de peregrinos cada año.
Los milagros que confirmaron su santidad
La canonización de Acutis fue posible gracias al reconocimiento de dos milagros atribuidos a su intercesión. El primero ocurrió en 2013, cuando un niño en Brasil sanó de una grave malformación congénita en el páncreas.
El segundo se registró en 2022, con la recuperación inesperada de una joven costarricense que sufrió un severo traumatismo craneoencefálico tras un accidente en bicicleta. La madre de la joven acudió a la tumba de Carlo en Asís para pedir por su salud y, según los médicos, la paciente comenzó a mejorar inexplicablemente ese mismo día.
Un modelo para los jóvenes
Durante la ceremonia, el papa León XIV pidió a los jóvenes del mundo inspirarse en la vida de Acutis, recordándoles que “no deben malgastar su vida en lo superficial, sino poner sus talentos al servicio del bien común”.
Con su canonización, Carlo Acutis se convierte en el primer santo millennial, un referente de fe para las nuevas generaciones en un mundo marcado por la tecnología y la digitalización.
La Iglesia reconoce ahora a San Carlo Acutis no solo como un símbolo de espiritualidad juvenil, sino también como un ejemplo de cómo la fe puede integrarse en la vida cotidiana a través de las herramientas digitales, manteniendo viva su misión de acercar la religión a los tiempos modernos.