Un macabro crimen conmociona a la región La Libertad. En el caserío de Hoyón, provincia de Santiago de Chuco, un anciano de 95 años identificado como Martín Narciso Cruz fue secuestrado y presuntamente enterrado vivo en un socavón minero como parte de un “sacrificio” al Muqui, un ser mítico de las minas vinculado a creencias populares en torno a la abundancia de minerales.
Según las investigaciones de la Policía Nacional, el hecho ocurrió el pasado 23 de julio, cuando cinco sujetos ingresaron violentamente al domicilio de la víctima, lo cubrieron con una manta mientras dormía y lo trasladaron hasta un socavón, donde habrían procedido a enterrarlo vivo.
Según la investigación preliminar, tras cometer el crimen, los agresores habrían introducido el cuerpo en un saco con mineral y lo trasladaron en un volquete hasta una planta procesadora del Parque Industrial de Trujillo.
Los presuntos responsables fueron identificados como Ismael Alva Verde, Santos Rodrigo Burgos Jiménez, Wilson Eladio Narciso Guzmán, Deyvis William Polonio Escobedo y Yostin Bolaños Narciso.
De acuerdo con fuentes policiales, dos de los detenidos admitieron ante las rondas campesinas que el acto se llevó a cabo como una ofrenda ritual al Muqui, buscando obtener prosperidad en la producción minera.
En un inicio, los involucrados negaron su participación y ofrecieron versiones contradictorias. Una de ellas señalaba que el adulto mayor no había sido enterrado en un socavón, sino que habría sido transportado en un volquete hacia Trujillo.
Ofrenda para el Muqui: realizaron un ritual minero
Sin embargo, esta declaración fue desestimada durante las investigaciones realizadas por la Policía Nacional del Perú, que recabó testimonios y pruebas que apuntan directamente al ritual minero como motivo del crimen.
El caso ha generado profunda indignación en la población y encendió las alertas en torno a la persistencia de creencias ancestrales vinculadas a prácticas de sacrificio humano en zonas mineras.
Ismael Alva Verde y Santos Rodrigo Burgos Jiménez, se les imputa los cargos de homicidio calificado con crueldad y alevosía, serán trasladados al penal El Milagro de Trujillo. Cabe precisar que por este mismo caso hay otras tres personas prófugas de la justicia.
Mientras tanto, las autoridades judiciales continúan las diligencias correspondientes para ubicar el cuerpo de la víctima y determinar las responsabilidades penales de los implicados, quienes enfrentan cargos por homicidio calificado.