Sigue la polémica entre la Universidad César Vallejo (UCV) y el jugador Paolo Guerrero, en medio de dimes y diretes, y la negativa del delantero de ir a Trujillo, el club sacó un comunicado donde señala que debe presentarse el martes 20 de febrero en Trujillo.
Desde hace unos días, el máximo goleador de la selección peruana de fútbol, Paolo Guerrero, reafirmó su decisión de no querer llegar al cuadro poeta, pues su familia recibió amenazas de extorsión el mismo día que firmó por el club. No obstante, el elenco trujillano le ha dejado claro que aún quiere contar con él para la Liga 1 Te Apuesto 2024.
Ante este contexto, UCV emitió un comunicado señalando que el 17 de febrero rechazaron el pedido de Paolo Guerrero de renuncia, al contrario están solicitando que se presente el martes 20 de febrero, incluso señalan que se le emitió el boleto de avión respectivo.
También desmintieron la versión del jugador Guerrero, quien mencionó que el club César Vallejo le pedía una indemnización . “No se ha solicitado un importe con concepto indemnizatorio, ni mucho menos ha planteado ningún requerimiento ni condicionante más allá de la solicitud de presentarse a los entrenamientos”, precisan en parte del comunicado,
Cada una de las partes se ha presentado en distintos medios de comunicación para compartir su postura respecto a este embrollo. Por un lado, el ‘Depredador’ se niega a llegar al Perú, mientras que Vallejo no quiere soltarlo fácilmente. En este contexto, el equipo que preside Richard Acuña emitió un comunicado previo a su duelo ante Sport Huancayo, en el cual rechazan la renuncia del futbolista y le brindan una nueva fecha para que llegue a Trujillo.
Paolo Guerrero denunció amenazas
Como se sabe fue el jugador Paolo Guerrero, quien hizo público algunas amenazas que llegaron al teléfono de su mamá, de presuntos extorsionadores, pidiendo cupos. A pesar de haber firmado un contrato con el club trujillano para toda la temporada 2024, Guerrero ha confirmado que no vestirá la camiseta de la Universidad César Vallejo (UCV).
La razón detrás de esta inesperada marcha atrás está relacionada con las amenazas que recibió su madre, Petronila Gonzales ‘Doña Peta’, tras conocerse su llegada al fútbol peruano. Guerrero compartió su experiencia durante la firma del contrato.
“El día que firmamos el contrato fue durante una tarde y vía WhatsApp. Ya teníamos días negociando, firmé el contrato y se lo envié a mi abogado, quien estaba en contacto con César Vallejo, especialmente con Richard Acuña, presidente del club. Estaba feliz y tranquilo, ya me hacía la idea de viajar a Trujillo. Sin embargo, esa misma noche, alrededor de las 8:00 p.m., mi madre me llamó muy preocupada. Me mostró los mensajes amenazantes que había recibido. Estaba muy nerviosa. Las amenazas eran concisas pero inquietantes”, dijo en una entrevista el jugador.
