Desde el 1 de agosto, entró en funcionamiento un nuevo protocolo para la venta presencial de boletos a Machu Picchu, implementado por la Unidad de Gestión de Machu Picchu (UGM). El objetivo principal es optimizar la atención a los turistas y reducir las largas colas que se registraban diariamente en Machupicchu Pueblo, en la provincia de Urubamba (Cusco).
Este nuevo sistema se pone en marcha tras múltiples quejas por parte de visitantes nacionales y extranjeros, quienes señalaban demoras y desorganización para adquirir entradas al santuario. La propuesta busca mejorar la experiencia del viajero mediante cambios logísticos clave.
Ampliación de horarios y más puntos de atención
Entre las principales novedades se encuentra la habilitación de cinco ventanillas simultáneas para la atención al público, una de ellas de uso preferencial. Además, el horario se ha extendido de 6:00 a. m. a 10:00 p. m., o hasta agotar el stock diario de mil boletos presenciales.
Asimismo, se ha incorporado una modalidad de pago más flexible, permitiendo transacciones no solo en efectivo, sino también con tarjetas bancarias y aplicaciones digitales como Yape y Plin. Se instalaron pantallas que informan en tiempo real cuántos boletos quedan disponibles, y se ha reforzado la presencia de orientadores para guiar a los visitantes.
Una de las decisiones más importantes es la eliminación del sistema de pre-ticket, lo que permite que la compra sea directa, sin pasos intermedios, beneficiando tanto a turistas como a residentes locales.
“No se emitirá ningún boleto adicional”
El ministro de Cultura, Fabricio Valencia, aseguró que estas medidas forman parte de un paquete integral orientado a la protección del patrimonio y a garantizar una experiencia turística ordenada. “Estas mejoras forman parte de un conjunto de medidas adoptadas por el Ministerio de Cultura y las entidades que integran la UGM, con el objetivo de proteger el patrimonio y garantizar una experiencia turística ordenada y de calidad”, señaló.
Valencia fue enfático al precisar que el aforo actual se mantendrá estrictamente, con un máximo de 4,500 visitantes diarios en temporada baja y 5,600 en temporada alta, lo que incluye los mil boletos vendidos presencialmente en Machupicchu Pueblo.
¿Cambiará el aforo de Machu Picchu?
El ministro también informó que el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (MINCETUR), junto a otras entidades, ya ha comenzado un nuevo estudio de capacidad de carga para el sitio arqueológico. Según explicó, “una vez concluido, el estudio será socializado con los organismos competentes, el sector privado y la población antes de su aprobación”.
Aunque aún no se ha determinado si habrá un incremento en el número de visitantes permitidos, las autoridades estiman que el proceso se extenderá por cerca de un año.