Una joven madre peruana que buscaba empezar una nueva vida en Italia fue asesinada presuntamente por su expareja, quien la había acosado y agredido previamente en Perú. Geraldine Sánchez Núñez, de 30 años, fue hallada sin vida el pasado 16 de julio en los alrededores del antiguo cuartel de Carabineros de Macherio, en la región de Lombardía, con signos evidentes de estrangulamiento.
El principal sospechoso del crimen es Alexander Vilcherrez Quilla, padre de los hijos de la víctima, quien llegó al país europeo hace apenas dos meses. Según la familia, Geraldine había emigrado a Italia hace un año para escapar de la violencia que sufría por parte del acusado. Sin embargo, él la habría seguido hasta Europa y continuó con el acoso. La joven había conseguido una orden de alejamiento, pero esta venció el mismo día del feminicidio.
Geraldine huyó de la violencia en Perú, pero su agresor la alcanzó en Italia
De acuerdo con las autoridades locales y versiones de testigos, el crimen ocurrió cerca de la vivienda de la víctima. Se escucharon gritos de sus hijos adolescentes, de 14 y 17 años, alertando que su madre no regresaba a casa. Un testigo relató que oyó una voz juvenil pedir perdón entre gritos y sirenas la noche del miércoles. Fue entonces que se confirmó el hallazgo del cuerpo sin vida de Geraldine, a pocos metros de su hogar.
Familiares de la víctima indicaron que supieron del asesinato al ver una inquietante publicación en el estado de WhatsApp de la joven, en la que aparecía una foto de Vilcherrez Quilla junto a la frase «Verdadero amor», pocas horas después del último contacto con ella. Además, señalaron que el acusado habría enviado un mensaje al hijo menor de Geraldine diciendo que “estaba con su mamá” y que “había logrado lo que quería”.
Uno de los tíos de la joven, residente en Italia, explicó que Geraldine llegó al país europeo con ayuda de su madre, buscando un lugar seguro tras una separación conflictiva. Según sus palabras, la sobrina huyó de Perú porque “él la golpeaba demasiado”, y fue su madre quien decidió llevarla a Europa ante el temor constante por su seguridad.
El presunto feminicida fue detenido por las autoridades italianas y se encuentra bajo custodia. Mientras tanto, la familia de Geraldine Sánchez solicita apoyo para repatriar sus restos y poder darle el último adiós en su tierra natal.